Para conseguir un empleo, en cualquier lugar
del mundo, no sólo basta con la experiencia, la actitud también es
importante. En el caso de Argentina, los procesos de selección suelen
ser directos, sencillos y sensatos. Al patrono le gustan, para decirlo
en criollo, las cuentas claras. Un buen comienzo es la base de todo plan o
proyecto.
Le recomendamos que elabore dos curriculum: uno que llamaremos el
formal, donde debe colocar sus carreras profesionales, habilidades, destrezas y
aptitudes. Y el informal, que se debe centrar en datos básicos, habilidades y
destrezas. Por ejemplo: Con un currículo formal, donde diga que
es ingeniero, no puede ir a buscar trabajo en un cine porque estaría
sobreclasificado. Por lo tanto, no lo tomaran en cuenta para esa
vacante.
Tips para enfrentar ese primer encuentro, adaptados
al estilo argentino:
*Al momento de asistir a las entrevistas hable
con sinceridad y exponga sus situaciones particulares. Ejemplo: “Tengo
un hijo de 3 años. Somos mi esposo y yo, cuando se enferme no tenemos quien nos
lo cuide por lo que si tiene reposo nos turnaremos los días”.
*Suelen iniciar las entrevistas con ¿Dígame su
experiencia?, ese es su momento de lucirse.
*No olvide indagar sobre la empresa. Tenga
una idea básica de: ¿A qué se dedican? Pueden preguntárselo.
*Al final de la entrevista le preguntarán ¿Tiene
alguna duda?, le aconsejamos que siempre pregunte algo, muestra
desinterés el no tener preguntas. Les gusta que la gente hable y
cuente como obtuvieron sus logros, sin ser tan extensos.
*Son informales en cuanto a la vestimenta. Por
ejemplo, los hombres no usan corbata si van a una entrevista como ingeniero. En
el caso de las mujeres, eviten ir tan producidas.
*Empresas grandes, como Grupo Día, le
pueden solicitar una visita social a la vivienda, no se asuste, es parte
del proceso de ingreso.
La recomendación de oro es: siéntete
seguro, confía en ti, di la verdad y no tomes nada personal.
Maminmigrante / Anny Coronado Reyes
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